Marca propia, más que una buena reputación

Marca propia y reputación

La marca propia es un concepto que ha venido ganando mayor importancia sobre todo a partir de la “Generación Y” (nacidos a partir de la época de los 80), y aunque no es un concepto totalmente nuevo, teniendo en cuenta que desde las antiguas civilizaciones ya se hablaba de la importancia de la reputación y la individualidad, esta generación, la Y, quienes se reconocen como nativos digitales, han hecho del entorno tecnológico una parte importante para su desarrollo tanto profesional como personal, de allí la importancia de construir una marca propia.

Aunque muchos aún crean que la reputación o prestigio es algo que solo aplica para las marcas, productos o personas que gozan de popularidad, pueden estar errados, pues esto es ahora un activo intangible, hace parte de la credibilidad y la fiabilidad, si los demás escuchan y le dan validez a sus conocimientos o pensamientos quiere decir que confían en su criterio profesional. Sin embargo este resultado no es fácil y rápido de lograr, puede tardar algunos años en madurar, dependiendo de la importancia que le de cada uno. Actualmente con esta generación de nuevos profesionales, este proceso arranca desde que iniciamos una vida laboral activa, tanto así que la información o conocimientos que años atrás solo aparecía en las HV o CV ahora es expuesto en plataformas como blogs, páginas personales y/o redes sociales, con el fin de construir una imagen para proyectar y hacer que hayan mejores posibilidades en el ámbito laboral.

Construir una buena reputación es una gran responsabilidad, pues puede influir de manera positiva o negativa en la vida laborar. Actualmente las empresas no solo se conforman con la información o conocimientos que se incluyen en una HV o CV, ahora es más importante, sobre todo en el caso de las personas que se desempeñan en el ámbito digital, tener una vida activa y haber construido una marca propia que los lleve a concluir que es la persona indicada para ocupar la vacante.

Aunque parece sencillo, también puede llegar a ser muy peligroso, pues construir y lograr tener una buena marca propia sabemos que no se logra de la noche a la mañana, pero perderla puede llevar muy poco tiempo, un mal comentario, un contenido que hiera susceptibilidades o inclusive una mala experiencia en la vida Online o en la vida Offline, puede desencadenar un efecto viral, y lo que ha venido trabajando por años se venga abajo súbitamente.

Los dos ejes vitales de una construcción de marca propia son, como aparece en Google y las opiniones y comentarios generados en las redes sociales, por esto es tan importante el ser cuidadosos a la hora de compartir contenido, se debe saber de que estamos hablando y porque lo estamos compartiendo, para así lograr el objetivo propuesto.